Antes de freír el pescado y los mariscos se vierte un poco de aceite de oliva en la paella y se pone ésta a temperatura máxima para que se caliente rápidamente. Una vez que el aceite esté bien caliente se puede bajar un poco la temperatura para que no se quemen los ingredientes a la hora de freírlos.
Con el aceite caliente se comienza por freír los langostinos y las gambas. Sólo hace falta freír los langostinos y las gambas durante unos minutos. Al freírlos cambiarán de color y serán un poco rojizos. Tras unos minutos se sacan las gambas y los langostinos de la paella (usar una espumadera para ello) y se dejan en un plato a parte.
A continuación se fríen los trozos de pota (o sepia) y de emperador (o mero). Con ayuda de la espumadera se giran los trozos cada cierto tiempo para que se fríen por todos los lados. Cuando obtengan el color cómo en la fotografía se puede añadir el ajo cortado y la fritada o sofrito. Se mezcla todo con la espumadera y se fríe durante unos minutos más sin que se queme ningún ingrediente.
El próximo paso que se explica en la siguiente página consiste en añadir el arroz y el caldo de pescado.